Mi nueva profesión

jueves, 28 de mayo de 2015

LLuvia de piropos. Diplomas Tutoría 2012

Hace unas semanas hicimos en tutoría una actividad que resultó de lo más agradable. Se trataba de que todos los alumnos/as de la clase pensaran aspectos positivos de todos y cada uno de sus compañeros. Estaban prohibidas las cosas que no nos gustan y que nos separan. A cada alumno le dí una lista de la clase y un ratillo para pensar. Dijeron cosas muy chulas, algunas muy llamativas, otras que revelan una gran amistad y cariño por sus compañeros.

Después de esto hicimos una dinámica que llamamos "lluvia de piropos". Se trataba de que, aquellos que lo desearan, salían a la pizarra, les sentábamos en una silla, y nos poníamos a hablar bien de ellos. Los muchachos salieron de lo más contento.

Visto el resultado, se me ocurrió que podía pedir la complicidad de los padres, a los que también les prohibía "sacar pegas". Éxito rotundo. Les pareció una idea estupenda, y me agradecieron la iniciativa, por que les ayudaba a pensar bien en sus hijos, a escarbar en sus talentos y virtudes y sacarlos a la luz, les alejaba de ciertos roces que hay en todas las familias, y era una oportunidad para decirles lo mucho que les quieren. Me ha encantado ver toda esta relación familiar, y la cantidad de adjetivos y piropos que se pueden decir de un hijo/compañero.

Por preservar la intimidad de los muchachos, he quitado los nombres de los diplomas y he desordenado las transparencias respecto al orden de la lista de clase. Pero seguro que mis alumnos, cuando vean este documento, saben "quién es quién".




sábado, 9 de mayo de 2015