Mis alumnos de 4º de ESO, de los que tanto he hablado en este curso, me han vuelto a impresionar. En ocasiones los "utilizo" como "probadores de herramientas 2.0" que voy descubriendo. Y a todo me dicen que sí. Un lujo de alumnos. A lo largo del curso hemos ido negociando cómo queríamos trabajar los contenidos entre diferentes opciones que les presentaba. Y tengo la impresión de que cuando a un alumno/a le dejas elegir el cómo y el qué (respecto a los productos que tiene que generar para mostrar su trabajo y su aprendizaje), trabaja mejor, se responsabiliza más y se compromete con lo que hace. Mi experiencia con estos chicos es que a lo largo del año también se han comprometido mucho con el equipo que en cada ocasión les tocaba trabajar.
El caso es que teníamos que tratar en la asignatura los temas de redes informáticas e internet, y les pedí que se empaparan de los contenidos, resolviéndoles yo algunas dudas en el camino, ayudando a encauzar un poco su trabajo. Les pedí que hicieran una presentación que les sirviera de soporte para la explicación oral que en grupos de tres tendrían que hacer en clase a sus compañeros.
Además, estos chicos/as se han acostumbrado a lo largo del año a documentar todo lo que hacen, y en clase utilizan con asiduidad la cámara de fotos o la de vídeo para luego poder publicar en el blog de la asignatura lo que han hecho, sus reflexiones, sus aprendizajes, sus éxitos y sus tropezones. Hacen una reflexión continua de lo que están aprendiendo y de la manera de organizar su tarea.
Hace un par de semanas, en una de las comunidades educativas de Google Plus en las que participo, alguien publicó como recurso una aplicación llamada RealTime Board, una especie de pizarra digital interactiva y colaborativa en la que se puede trabajar de manera síncrona. Se instala como aplicación interna en el navegador Google Chrome, y permite conexiones con Google Drive, inserción de imágenes, formas, iconos, así como incorporación de ficheros PDF, vídeos de Youtube desde sus enlaces, realización de rutas por el documento al estilo Prezi. Incluso incluye un chat para acordar tareas mientras se trabaja desde ubicaciones diferentes.
Tres días de trabajo en el aula de informática les han dado para mucho, y estos son los resultados. Para ser su primera pizarra digital cooperativa, resulta una producción por parte de los alumnos bastante aparente ¿no? ¿Hasta dónde habrían llegado si les llego a dar otra semana?
Probablemente sin pretenderlo, lo que les ha salido es una especie de mapa mental (aunque no apoyado solamente en conceptos e imágenes relacionados entre ellos, si no además enriquecido con muchos otros contenidos como textos y vídeos).
Cada vez tengo más claro que una de las posibilidades de innovar en educación pasa por atreverse a proponer, crear complicidades con los alumnos y darles libertad para hacer. Me impresiona la capacidad que mis alumnos tienen para aceptar con naturalidad cualquier nueva herramienta que se les proponga, y la facilidad y rapidez con la que enseguida se convierten en usuarios competentes de la misma.
Paco Montero, profesor de Tecnología.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tus comentarios!