- Conectarte en ordenadores que no sean el tuyo.Recuerda cerrar la sesión de cualquier red social siempre que te conectes desde un ordenador que no sea el tuyo.
- Los primeros encuentros.No vamos a decir que no pueda hacerse nunca. Aplica la lógica que utilizas en tu vida fuera de la red cuando estás ante un desconocido y todo estará bien. Avisa a tu entorno de con quién has quedado y dónde, si puedes vete acompañad@... Vamos, las cosas “de toda la vida”.
- Las fotos que cuelgas en la Red.Antes de subirlas piensa que, una vez arriba, pueden llegar a manos de cualquiera y eso podría tener consecuencias. Si dudas con alguna foto, mejor no las publiques ni se las envíes a desconocidos por email.
- Tontear, coquetear, vacilar, etc.Si te comportas como sueles hacer en tu vida fuera de la red todo estará bien. Estar en Internet no es excusa para comportarte como no eres.
- Creerte todo lo que ves/lo que te dicen.En las Redes Sociales, como en la vida real, hay mentiros@s para parar un tren.. “Yo soy”, “yo tengo”, “yo hago”... claro que ya debes saberlo. Tú pasa de ellos. Verás qué rápido desaparecen.
- Hacerte pasar por otr@ en la Red.Hacer daño no es divertido. Por eso, no utilices fotografías que no te pertenecen ni te hagas pasar por otro en la Red. No envíes mensajes en contra de nadie ni respondas a los que recibes. Piénsalo 2 veces y verás que no merece la pena..
- Compartir contraseña.Lo mejor es que nadie conozca tu contraseña. No se la digas a nadie y procura que no sea fácil de adivinar.
- Contarlo todo de ti.Dónde vives, dónde estudias, dónde veraneas, con quién te mueves, qué haces los fines de semana,... Ajusta la privacidad de tus redes sociales para que sólo tus amigos puedan saber cosas de ti. Los demás no necesitan saberlo.
También es necesario poner medidas de seguridad para tu máquina:
Netiqueta Joven para Redes Sociales
Muestra consideración y respeto hacia los demás:
• 1-. Pide permiso antes de etiquetar fotografías subidas por otras personas.
Puede ser que a pesar de estar publicadas online no sea conveniente estar etiquetado para alguien.
• 2-. Utiliza las etiquetas de manera positiva, nunca para insultar, humillar o dañar a otras personas.
Ayuda a crear el ambiente agradable y de confianza que a todos nos gusta compartir.
● 3-. Mide bien las críticas que publicas. Expresar tu opinión o una burla sobre otras personas puede llegar a vulnerar sus derechos e ir contra la Ley.
La libertad de expresión termina donde comienzan los derechos de los demás. La injuria, la calumnia y otras acciones contra el honor o la intimidad son delitos.
• 4-. No hay problema en ignorar solicitudes de amistad, invitaciones a eventos, grupos, etc.
Si lo hacen contigo, no insistas ni pidas explicaciones.
• 5-. Evita la denuncia injusta como SPAM para no perjudicar a quienes hicieron comentarios correctos.
La información abundante, interesante y veraz es un tesoro.
• 6-. Usa las opciones de denuncia cuando esté justificada la ocasión.
Realizar acusaciones a la ligera o de manera injusta genera desconfianza y enfado.
Cuida la privacidad de las demás personas:
• 7-. Pregúntate qué información de otras personas expones y asegúrate de que no les importa.
En ocasiones contamos aspectos de nuestra vida con otras personas o de la vida de los demás sin tener en cuenta cómo les puede afectar que eso se sepa. Respeta la privacidad de los demás como te gustaría que respetasen la tuya.
• 8-. Para etiquetar a otras personas debes hacerlo sin engaño y asegurarte de que no les molesta que lo hagas.
Cuando etiquetas a alguien estás aportando mucha información que además, en muchos casos, se propaga de forma inesperada e incómoda.
• 9-. No puedes publicar fotos o vídeos en las que salgan otras personas sin tener su permiso, como regla general.
La imagen (fotografía, vídeo…) de cada cual es un dato personal y el derecho a decidir cómo se utiliza le pertenece a esa persona en exclusiva.
• 10-. Antes de publicar una información que te han remitido de manera privada, pregunta si lo puedes hacer.En las redes sociales, la información circula con demasiada velocidad de un lado a otro y lo que es privado se puede convertir en un secreto a voces.
Contribuye al buen ambiente de la Red:
• 11-. Facilita a los demás el respeto de tu privacidad e intimidad. Comunica a tus contactos, en especial a los nuevos, cómo quieres manejarlas.
Deja claro tu criterio para que lo puedan respetar diciéndoles qué cosas no admites como, por ejemplo, que reutilicen fotos que puedan ver en tus álbumes privados, que te etiqueten sin permiso o que expongan datos acerca de ti en páginas a la vista de otros.
● 12-. Recuerda que escribir todo en mayúsculas puede interpretarse como un grito.
Se trata de un acuerdo, de una norma no escrita que muchas personas utilizan. Tenerla en cuenta no supone esfuerzo y ayuda a entenderse bien en cualquier circunstancia.
● 13-. Usa los recursos a tu alcance (dibujos, símbolos, emoticonos…) para expresarte mejor y evitar malentendidos.
El estado de ánimo, las diferencias culturales o sociales, las experiencias previas… pueden dificultar la comunicación entre dos personas, más aún si ni están cara a cara. Comprender y utilizar símbolos de apoyo te ayudará a esquivar problemas por malas interpretaciones.
• 14-. Ante algo que te molesta, trata de reaccionar de manera calmada y no violenta. Nunca actúes de manera inmediata ni agresiva. A veces las cosas no son como parecen. Puede que simplemente busquen la provocación o el engaño y si se reacciona mal habrán conseguido su objetivo. Puede tratarse también de errores o acciones no intencionadas.
● 15-. Dirígete a los demás con respeto, sobre todo a la vista de terceros.
Si alguien comete algún error, imprudencia o te molesta, sé amable al hacérselo ver y, si es posible, hazlo en privado.
● 16-. Lee y respeta las normas de uso de la Red Social.
No todas las redes sociales (Tuenti, Facebook, Hi5, Bebo, Orkut, Fotolog…) tienen las mismas reglas. Sin embargo, siempre son las reglas de juego de obligado cumplimiento para todos.
Fuente de información de esta parte:
Decálogo para una víctima de ciberbullying
Jorge Flores Fernández - Septiembre 2010
Se ha recorrido ya un largo camino para sensibilizar e informar sobre la amenaza del ciberacoso. Se ha conseguido llamar la atención sobre este fenómeno para movilizar a la ciudadanía y a las diversas administraciones públicas que, en muchos casos y especialmente en el ámbito escolar, han activado planes y recursos preventivos. Sin descuidar lo anterior, porque la lucha es constante, hay que avanzar un paso más y crear recursos y procedimientos para la intervención… ¿qué hacer cuando se produce un caso?. Es preciso establecer tanto servicios de apoyo como protocolos de intervención para la gestión autónoma. Cuando se descubre una situación de este tipo, la comunidad educativa trata de dar una respuesta basada en el conocimiento del bullying tradicional y los planes de convivencia diseñados. Sin embargo, son muchos los matices y diferencias en relación al tradicional acoso escolar y demasiado importantes las consecuencias como para permitirnos el lujo de equivocarnos. Cada minuto que pasa la víctima está a un click de sus acosadores. Intervenir de inmediato y hacerlo de forma adecuada es clave. En ocasiones la iniciativa debe ser de la propia victima y, en todo caso, es precisa su colaboración.
Decálogo para una víctima de ciberbullying:
1) Pide ayuda. Si eres menor recurre a tu padre o tu madre o, en su defecto, a una persona adulta de confianza. Asegúrate de que esa persona conoce y entiende estas pautas para que ambos podáis remar en el mismo sentido y para que, en su ánimo de protección, no haga cosas que acaben siendo perjudiciales.
2) Nunca respondas a las provocaciones. Hacerlo no te ayuda en nada y, sin embargo, es un estímulo y una ventaja para quienes te acosan. Mantén la calma y no actúes de forma exagerada o impulsiva en ningún caso.
3) No hagas presunciones. Puede que ni las circunstancias ni las personas que parecen implicadas sean como aparentan. Mantén un margen para la duda razonable porque actuar sobre bases equivocadas puede agravar los problemas y crear otros nuevos.
4) Trata de evitar aquellos lugares en los que eres asediado en la medida de lo posible hasta que la situación se vaya clarificando. Si se trata de redes sociales o comunidades online no te será difícil. Si el acoso llega por el teléfono móvil, no descartes cambiar de número.
5) Cuanto más se sepa de ti, más vulnerable eres y más variado e intenso es el daño que pueden causarte. ¿Imaginas una mentira ridiculizándote construida sobre datos privados reales escrita en tu muro?¿qué pasaría si alguien, haciéndose pasar por ti, insulta a tus amistades?. Es momento, por lo tanto, de cerrar las puertas de tu vida online a personas que no son de plena confianza. Para ello:
a) Evita intrusos. Para ello debes realizar, en orden, estos pasos:
a.1) Realiza un chequeo a fondo de tu equipo para asegurarte de que no tienes software malicioso (troyanos, spyware…) que puede dar ventajas a quien te acosa. Es importante. Dispones de herramientas gratuitas para ello en la dirección www.osi.es.
a.2) Cambia las claves de acceso a los servicios online que usas, pero nunca antes de haber realizado el paso anterior. Recuerda que deben ser complejas de adivinar y llevar combinados números y letras.b) Depura la lista de contactos. Revisa y reduce la lista de contactos que tienes agregados en las redes sociales (o en otros entornos sociales online).
c) Reconfigura las opciones de privacidad de las redes sociales o similares en las que participes y hazlas más estrictas. Asegúrate de que sabes bien cómo funcionan estas opciones y sus implicaciones.
d) Comprueba qué cuentan de ti online. Busca la información sobre ti publicada otras personas y trata de eliminarla si crees que puede ser utilizada para hacerte daño.
e) Repasa la información que publicas y quién puede acceder a ella y poner, a su vez, al alcance de terceras personas.
f) Comunica a tus contactos que no deseas que hagan circular informaciones o fotografías tuyas en entornos colectivos.
g) Ejerce tu derecho sobre la protección de datos personales. Tú decides el uso que se puede hacer de ellos, incluyendo tu fotografía.
6) Guarda las pruebas del acoso durante todo el tiempo, sea cual fuere la forma en que éste se manifieste, porque pueden serte de gran ayuda. Trata también de conocer o asegurar la identidad de los autores pero, en todo caso, sin lesionar los derechos de ninguna persona.
7) Comunica a quienes te acosan que lo que están haciendo te molesta y pídeles, sin agresividad ni amenazas, que dejen de hacerlo. Recuerda que no debes presuponer hechos o personas en tu comunicación, por lo que debes medir muy bien cómo lo haces, sin señalar a nadie en público, pero a la vez tratando de asegurarte de que se entera la persona o personas implicadas.
8) Trata de hacerles saber que lo que están haciendo es perseguible por la Ley en el caso de que el acoso persista. Les puedes sugerir que visiten páginas como www.e-legales.net o www.ciberbullying.net para que lo comprueben por sí mismos.
9) Deja constancia de que estás en disposición de presentar una denuncia, si a pesar del paso anterior continúa el acecho. Manifiesta que cuentas con pruebas suficientes recopiladas desde el inicio y que sabes cómo y dónde presentarlas. Debes indicar que, si el acecho persiste, te verás obligado a acudir a la policía.
10) Toma medidas legales si la situación de acoso, llegado este punto, no ha cesado.
Algunas notas a considerar para la puesta en práctica de estas recomendaciones:
• Aunque son, en su mayoría, pautas de aplicación también para víctimas adultas y fuera del contexto escolar, cuando se deseen transmitir a niños y adolescentes se precisa una modulación en la forma de comunicar el mensaje.
• Cada caso y persona es diferente. Por ello, estas indicaciones pretenden ser de ayuda, de forma completa o parcial, en los sucesos más comunes.
• El orden en que se toman las medidas es importante. No obstante, la gravedad de los hechos en algunos casos puede requerir acelerar la ejecución de determinados pasos, reducir el intervalo entre ellos o directamente obviarlos.
• En casos extremos, la solicitud de ayuda a la policía debe ser inmediata.
Este decálogo es una de las aportaciones de PantallasAmigas al primer Protocolo de Actuación Escolar ante el Ciberbullying desarrollado por el EMICI con la colaboración del Departamento de Educación del Gobierno Vasco. Mientras se ultima su revisión el curso escolar ha empezado y, por ello, deseamos avanzar aquí estas pautas básicas e inéditas para quien le puedan resultar de ayuda.
Fuente: http://www.pantallasamigas.net